TALLER 7
EL DOMINIO DE LOS OCÉANOS Y LA EXPANSIÓN EUROPEA
CAUSAS
DE LAS EXPLORACIONES GEOGRÁFICAS
Durante mucho tiempo los
europeos estuvieron convencidos que el mundo no era más que Europa, África y Asia,
regiones con las cuales habían tenido contacto desde siempre, pero cuya
geografía y dimensiones reales ignoraban. El escaso conocimiento que se tenía
de ellos el aportado por los viajeros. Un gran ejemplo es Marco Polo y sus noticias
del extremo oriental del Asia.
LA CONTRADICCIÓN POR ORIENTE
Según los conocimientos
geográficos y los mapas de la Edad Media, Oriente era una región que reunía
muchas riquezas y maravillas, especialmente en Catay y la isla de Cipango en
donde según contaba Marco Polo, el palacio del rey tenía murallas de plata y
enormes techos de oro.
Además, se sabía que en
Oriente se producía la mayor cantidad de especias, sedas y piedras preciosas,
artículos muy apetecidos por las gentes más ricas de Europa.
Sobre la posibilidad de
emprender grandes viajes los europeos tenían extrañas creencias: se pensaba en
la existencia de tenebrosos monstruos marinos que devorarían las naves de un
solo mordisco, o en temperaturas elevadísimas
en la zona ecuatorial que harían imposible que una persona sobreviviera allí.
EL
BLOQUEO TURCO Y LAS NUEVA RUTA A LAS INDIAS
Recordemos que en los
últimos siglos medievales Europa vivió una expansión comercial que le
intensificó la comunicación con Oriente. Las ciudades costeras del Mediterráneo
y del mar del Norte eran centros comerciales de gran actividad, de las cuales
partían navegantes y mercaderes hacia las ciudades del oriente próximo.
La más importante de estas
ciudades era Constantinopla. Allí se reunían comerciantes de oriente y
occidente a intercambiar sus productos. De tales comercios llegaban a los
europeos las sedas, especies y joyas de oriente que tanto gustaban a nobles y
burgueses. En consecuencia, la toma de Constantinopla por los turcos en el año
1453 bloqueó el tránsito de esos productos y obligó a los comerciantes y
naciones a pensar otras rutas que les permitiera seguir alimentando ese rico
mercado.
NUEVAS
IDEAS SOBRE LA FORMA DE LA TIERRA
El común de los europeos creía
que la tierra era una superficie plana. Sólo unos poquísimos hombres
interesados por el conocimiento de la naturaleza sabían de la existencia de
viejas ideas y demostraciones sobre la redondez del planeta. Pero durante el
siglo XV, cada vez más geógrafos y cartógrafos, influenciados por el espíritu
científico del renacimiento, aportaron nuevas teorías sobre la forma de la
tierra y perfeccionaron las técnicas de elaboración de mapas.
Actividad
1
¿Qué similitudes y que
diferencias encuentras entre las exploraciones geográficas del siglo XV y los
viajes espaciales?
¿Por qué crees que algunas
personas arriesguen la vida por emprender grandes viajes a lo desconocido? ¿Lo
harías tú?
Comparen los avances
tecnológicos que fueron necesarios para los grandes viajes oceánicos del siglo
XV, con los que se necesitaron para los viajes espaciales del XX.
DE
VIAJES Y NAVEGANTES
¿Qué motivos impulsaron a
los navegantes del siglo XV a emprender largos y arriesgados viajes? Sin duda
uno de ellos fue la búsqueda de una nueva ruta hacia las Indias y el incentivo
de hallar riquezas en oro y especias para vender en las cortes y mercados de
Europa. También estaba el deseo de tener tierras y siervos a la manera de los
feudos europeos, en donde ya no había más tierras disponibles y cada vez menos
ciervos que explotar.
Así mismo, como hombres del
renacimiento, los exploradores europeos sintieron la necesidad de comprobar con
sus propias vivencias la inmensidad y variedad del mundo, de seguir en pos de
sus propias ideas sobre la geografía terrestre, la navegación y las fábulas
fantásticas que se decían de las lejanas tierras.
VIAJES
PORTUGUESES EN EL SIGLO XV
Los primeros navegantes que
buscaron nuevas rutas para el comercio con Oriente fueron los portugueses,
quienes desde las primeras décadas del siglo XV iniciaron sus viajes y
exploraciones en el océano Atlántico, bordeando las costas africanas. Todo
empezó porque las tierras de Portugal, en grandes partes montañosas y áridas,
impidieron que allí se desarrollara una fuerte economía agrícola. A cambio,
desde finales de la Edad Media sus actividades económicas se orientaron hacia
el mar. La pesca tuvo un gran desarrollo y los barcos pesqueros alcanzaban las
costas de Irlanda y el norte de África, mientras los balleneros se aventuraban en
el Atlántico. Además comerciaban, en especial con el norte de Europa.
Esta suma de elementos les
hizo excelentes navegantes y armadores (constructores de barcos), que por
necesidad debían tratar de explorar el Atlántico, pues el Mediterráneo estaba
tomado por italianos y musulmanes.
Las exploraciones marítimas
fueron apoyadas por el príncipe Enrique "el Navegante”, quien aunque nunca
navegó tomó este nombre por el aliento que daba a los marinos para que se
aventuraran cada vez más lejos. Su pación por las ciencias lo llevó a fundar un
escuela náutica donde reunió cartógrafos y pilotos para programar la navegación
por la costa africana hacia el sur. Enrique el Navegante tenía además otros
propósitos: uno de ellos era combatir la presencia musulmana en el continente
africano, encontrar riquezas en oro o en especias y descubrir una nueva ruta
hacia las Indias.
Poco a poco, en un proceso
que duró décadas, los portugueses se aventuraron cada vez más al sur por la
costa africana. Los sucesivos viajes les permitieron acumular la experiencia
naviera y de construcción que terminó por llevarles hasta el extremo sur de
África y finalmente bordearla para llegar a la India.
LOS
AVANCES EN LAS TÉCNICAS DE NAVEGACIÓN
La experiencia para la
navegación oceánica fue un aporte que los portugueses legaron a los marinos
europeos, así como la carabela fue el navío que permitió la realización de
viajes a grandes distancias. Otros instrumentos como la brújula, el reloj de
arena o ampolleta y el astrolabio hicieron posibles recorridos cada vez más largos.
Otra gran innovación fue el uso del cuadrante, que permitió a los marinos medir
la altura de las estrellas y determinar así la latitud.
VIAJE
DE ORIENTE HACIA OCCIDENTE
Los estados de Europa
occidental no eran los únicos que tenían la necesidad de hallar una ruta hacia
Oriente; algunos intrépidos navegantes orientales también quisieron aventurarse
en el océano en camino hacia occidente. Antes de que los portugueses se lanzaran
al océano Atlántico, el almirante chino Zhen He salió de su continente en 1405
y realizó varias expediciones de grandes distancias. Zhen He recorrió las islas
del mar del sur y se introdujo en el océano Índico hasta llegar a la India,
Arabia y finalmente al continente africano en 1433. Las exploraciones chinas no
siguieron adelante a pesar de los logros de Zhen He, a causa de las grandes
prioridades que tenía el imperio Chino como era la construcción del Gran Canal
para comunicar el interior de su inmenso territorio.
EL
ENCUENTRO CON EL NUEVO MUNDO
Mientras los navegantes
portugueses exploraban las costas del continente africano, Cristóbal Colón
pensó atravesar el océano Atlántico para llegar a las Indias, apoyado en la
teoría de la redondez de la tierra y en los trabajos geográficos de Paolo
Toscanelli.
El navegante genovés había
vivido durante algunos años en Portugal, en donde frecuentó la compañía de
marinos portugueses. Allí fue donde primero intentó conseguir apoyo a sus planes.
Sin embargo, los expertos portugueses creyeron -tal vez sabían a ciencia
cierta- que las ideas de Colón eran disparatadas pues las distancias reales
entre Europa y Asia por el Atlántico eran mucho mayores y que por ello no
alcanzaría a llegar a su destino. Buscando otras posibilidades, Colón presentó
sus planes a la Corona de Castilla y mostró las ventajas que traerían para el
estado español. Los reyes católicos, que tenían la necesidad de encontrar una
ruta hacia el continente asiático distinta a la que tenían monopolizada los
portugueses por la costa africana, apoyaron las ideas de Cristóbal Colón.
Con la financiación de varios
inversionistas privados y de la corona de Castilla, partió Colón y navegó 61 día,
hasta encontrar una pequeña isla a la que dio el nombre de San Salvador, pues
evidentemente lo había salvado del fracaso. De allí navegaron luego por Cuba y
La Española (Santo Domingo).
En los años siguientes
Colón organizó tres viajes más, estos ya con finalidad colonizadora, por lo
cual llevó mujeres, animales de crianza y plantas para la agricultura. En tales
viajes fundó asentamientos humanos y recorrió las costas centroamericanas y el
extremo noroccidental de Colombia.
A pesar de que nunca
encontró las ciudades chinas que buscaba, ni al famoso y riquísimo Gran Khan,
Colón siempre creyó haber llegado a Cipango, el legendario reino descrito por
Marco Polo. Jamás tuvo ni siquiera sospechas de que se encontraba en un mundo
desconocido para los europeos.
Al tiempo que Colón
realizaba su tercer viaje, el navegante portugués Pedro Alvarez Cabral,
navegando hacia la India desvió sus naves excesivamente hacia el Oeste y de
esta forma tocó tierras del Brasil en 1500.
LA
PRIMERA REPARTICIÓN DEL MUNDO
Ya desde aquellos primeros
albores el destino de América estaba marcado: ser repartida como un pastel entre
las potencias. Efectivamente, para dirimir las disputas entre españoles Y portugueses
sobre la propiedad de las tierras descubiertas, el papa, sin que existiera un solo
católico en las tierras descubiertas, las repartió trazando una línea. Al
occidente de ella las tierras serían españolas y al oriente portuguesas. Como
esta primera línea dejaba sin tierras en América a los portugués, debió ser
corrida por un segundo tratado, el de Tordecillas de 1494. Así, Portugal pudo
apropiarse de buen parte del actual Brasil y España de todo lo demás.
VIAJES DE AMÉRICO VESPUCIO
Hasta su último viaje,
Cristóbal Colón estuvo convencido de haber llegado al Asia. Sin embargo en los
primeros meses de 1499 y junio de 1500 Alonso de Ojeda, Juan de la Cosa y
Américo Vespucio realizaron una navegación que comprobó para los europeos que
las islas alcanzadas por Colón hacían parte de un continente nuevo.
Los tres expedicionarios
llegaron en 1499 a las costas del norte del Brasil desplazándose hasta el Cabo
de la Vela en los límites de la actual Colombia, atravesaron el mar Caribe hasta
la isla Española y de allí retornaron a Europa.
Luego de realizar un
segundo viaje, Vespucio publicó su obra titulada Mundus Novus en la cual contó
sus numerosos descubrimientos geográficos. Desde entonces, la idea del Nuevo
Mundo se difundió en Europa a través de la obra Cosmographiae lntroductio del
alemán Martín Waldseemüller, publicada en 1507. En esta obra el continente descubierto
fue bautizado con el nombre de América, en homenaje a Vespucio.
LA PRIMERA VUELTA AL MUNDO
En 1519 el navegante portugués Fernando de Magallanes
se dirigió a la corona de España para ofrecerle al rey Carlos V un plan de
navegación que buscaba comprobar la existencia de un estrecho al sur del
continente americano, por el cual se podía llegar al océano Pacífico y de allí
a Oriente.
En efecto, navegó hasta las costas americanas y por
allí descendió buscando en anhelado estrecho. Tras un crudísimo invierno lo
encontró, logrando pasar al Pacífico, por donde navegó hasta las islas Molucas.
Allí Magallanes murió en un enfrentamiento con los nativos, tomando el mando de
la flota Sebastián Elcano. De las cinco naves ya sólo quedaban tres. Una de
ellas decidió regresar por el mismo camino de venida y otra naufragó. Así que
sólo un navío logró regresar a San Lúcar de Barrameda, con apenas 18 sobrevivientes
pero la comprobación de que la tierra era redonda.
VIAJES Y DESCUBRIMIENTOS
FRANCESES E INGLESES
Enterados los demás países de la existencia de América
y de las posibilidades de viajar por el Atlántico al Asia, emprendieron sus
propias expediciones. Inglaterra fue el primer país que después de España buscó
una ruta hacia la India por occidente. Dado que España y Portugal monopolizaban
las principales rutas por el océano Atlántico, Juan Caboto concibió la idea de
encontrar un estrecho al norte del continente americano.
Con el apoyo de mercaderes de Bristol, Caboto,
acompañado por su hilo Sebastián, zarpó en mayo de 1497 y en junio del mismo
año llegó a las penínsulas del Labrador y Terranova. En un segundo viaje este
navegante descendió por las costas de Norteamérica hasta alcanzar La Florida.
Caboto no encontró el estrecho para llegar a Oriente, ni las especias soñadas,
sino grandes extensiones de hielos, bosques y bacalaos, pero a cambio dio
inicio a los viajes europeos hacia el norte de América.
También la corona de Francia envió sus exploradores a
las costas de Norteamérica, uno de ellos, el florentino Juan Verrazano recorrió
en 1524 toda la costa noreste, y diez años después Jacques Cartier se introdujo
al continente por el río San Lorenzo.
CONSECUENCIAS DE LOS
DESCUBRIMIENTOS GEOGRÁFICOS
La llegada de los navegantes europeos al continente
americano implicó un gran avance en el conocimiento de la tierra, pues gracias
a la exploración de las costas de América se comprobó la existencia del que para
los estados europeos era un nuevo continente. Además, el hallazgo del estrecho
que comunicaba el océano Atlántico y el Pacífico permitió a los marinos
encontrar una nueva ruta hacia Oriente, partiendo por el Atlántico. De esta
forma se comprobaba, a partir de la experiencia, la idea de la forma redonda
del planeta. Las navegaciones bordeando las costas hacia el sur de América,
también determinaron progresos en la astronomía con el encuentro de las
constelaciones y estrellas del hemisferio sur.
Uno de los resultados inmediatos del descubrimiento de
América fue el crecimiento de la navegación y el comercio en el océano
Atlántico, mientras los tráficos comerciales por el mar Mediterráneo y el mar
del Norte empezaron a decaer.
Así mismo, los descubrimientos dieron origen a la
conquista y colonización en América, durante la cual numerosos exploradores europeos
(españoles, portugueses, franceses, ingleses y holandeses) se internaron en las
regiones más pobladas del Nuevo Mundo. Estos exploradores y conquistadores
trajeron su propia cultura, su religión y sus ambiciones que entrarían en
choque con la cultura y la forma de ver el mundo de los indígenas americanos.
Actividad 2
1.
Lea y realice un glosario con las
palabras que no entienda.
2.
¿Cuáles fueron las causas de las
exploraciones geográficas?
3.
¿Por qué los europeos no
realizaban largos viajes?
4.
¿Cuáles fueron las nuevas rutas a
la india?
5.
¿Qué
motivos impulsaron a los navegantes del siglo XV a emprender largos y
arriesgados viajes?
6.
¿Cuáles
fueron los viajes donde los europeos llegaron al continente Americano?
7.
¿Cuáles
fueron los descubrimientos Franceses E ingleses?
8.
¿Diga
las consecuencias de los descubrimientos geográficos?
9.
Realice
unos mapas de los viajes mencionados en la lectura. Es una nota aparte.